ALGO ANDA MAL, del miércoles 14 reunió a representantes de distintas tribus urbanas: metaleros, floggers y emos. Todos tuvieron oportunidad de expresarse en una entrega bien conducida por Santiago González y Guillermo Grance, de quienes podría decirse que tienen un buen futuro, si no fueran tan funcionales a los intereses de sus patrones. En esta ocasión presentaron un buen trabajo, aportando información, entretenimiento y debate. Deberían mejorar la escenografía, cuyo fondo sale arrugado y realizar un mayor esfuerzo con la iluminación.

Resultaron muy atractivas las exposiciones de los invitados, que bien guiados, se explayaron, incluyendo detalles sobre lo que parece más importante, sobre todo para emos y floggers: su look. Santiago, comparó con representantes de ambas tribus, prendas y peinados, sumando precios. Para los que no saben, lucir como emo o flogger, cuesta entre 500.000 y 700.000 Guaraníes.

Hubo gran cantidad de mensajes, entre los que llamó la atención la intolerancia de algunos, etiquetando a los chicos como vagos, malcriados y adjetivos algo más fuertes. A la vista estaba, que muy informados los de las tribus no son, porque no tenían idea de quien es Dionisio Borda y a gatas sabían que Fernando Lugo es el presidente. De todas formas, su aspecto es encantador, los atuendos muy creativos coronados por cabelleras cortadas y trabajadas aportando personalidad al conjunto. En resumen, el programa se disfrutó.