Lita Pérez Cáceres

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Derroche de simpatía

Nos enteramos de que Lucio Ruiz Díaz fue defenestrado y que la dupla que lo reemplazará en su noticiero madrugador será la integrada por Hugo Rubín y Cynthia Tarragó. Justo lo que se necesita para comenzar la mañana, buena onda y simpatía. Es una expresión de deseos.

Será mucho mejor para los madrugadores que miran la tele antes de ir a la oficina ver a la blonda vampi que ver a Lucio, eso es innegable. Pero, en cuanto a Huguito... ahí no estará con su papá, no estará en la radio donde dice muy orondo Es mi opinión, como si fuera un Catón. Le será cuesta arriba ganarse el rating con el sudor de su sonrisa. Le deseamos buena suerte, pero tendrá que pedirle un poco de carisma al papi, porque hasta ahora ninguno de sus retoños hace sombra al patriarca.

Valerio: EL MEJOR

Hay muy buenos operadores en la radiofonía nacional, muchachos que conocen de música, que tienen la chispa necesaria para interrumpir, que saben ubicar las grabaciones, pero en gusto musical, refinado y clásico, el mejor es Valerio Chaves, de la 970. Desde el piano bar, hasta Another brick on the wall, pasando por música cantada en italiano, él se pasa. Que no se me enoje Javier Núñez, ni Condorito, ni Juanma, hoy el winner es Valerio.

¿Hasta cuándo las vacaciones?

Señoras y señores conductores de radio, les pregunto hasta cuando estarán de vacaciones. Todos los jueves espero que se inicie otra temporada de Escape de Asunción en la radio más meridional de esta capital de azahares (está por caerse al río)y me pasan grabaciones viejas. También me preparo los domingos para ir a la sobremesa con Lucio Sandoval, pero él no aparece. Y así el oyente se va desilusionando. Por suerte permanecen los buenos como Alberto Peralta, Manuel Bernardes y Pimpollo, Enrique Vargas Peña, Fernandinho Ruiz Díaz, entre otros. Ah, los sábados Edith Medina.

Se ha formado una pareja

Un periodista, productor y docente ha caído en las redes del amor. Él está atrapado por las virtudes de una rubia modelo que no sabemos si le corresponde. Tan mareado está el hombre, que la otra noche llamó a un número de celular y dijo "Hola...Egni.." Pero se había equivocado y había marcado el número de una vetusta profesora, que ni corta ni perezosa le respondió "No, yo soy Helen Roux". Son las trampas del amor.