Lita Pérez Cáceres

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Semana santa aburrida

Para los que no vamos a la campaña en los días santos, para los que no jugamos al truco hasta emborracharnos y matar a nuestros semejantes, para los que no podemos pegarnos un viajecito a Punta del Este o a una estancia en las cercanías, para los resignados a pasar esa semana de largo feriado frente a la caja boba, la tele, en este 2010 fue un fiasco. Ni siquiera HBO estrenó algo interesante, en los canales de aire de nuestra benemérita ciudad de Asunción ni siquiera noticiero hubo. En las radios sólo Humberto siguió trabajando como si nada ¡GRACIAS HUMBERTO! Me dirán que pude haber alquilado alguna película, pero ir hasta el local me daba fatiga y es posible que haya estado cerrado. ¡Qué triste es la vida de los no religiosos!

Terminó la tregua

Estoy mirando, durante las pausas comerciales de El Profeta, la telenovela del Telefuturo y creo que cumple con algunos requisitos básicos. La mala es muy mala (la del cabello corto que le hace la vida imposible a la buena de Lourdes Llanes), es tan mala que hasta yo la odio y eso que no me enganché con la novela. El chico que parece interesado en la chica del campo, hija de Lourdes Llanes, hablo del más jovencito, tiene un serio problema de dicción. Alguien debería enseñarle que para hablar debe abrir bien la boca, el chetismo no funciona en la tele. A la abuela le sucede lo mismo, es demasiado caté, si me permiten el término. Su falso tono de coyguá le queda pateable. Hay muchos que actúan de sí mismos, como Nico García, que siempre es Nico y probablemente no sea su culpa sino de los productores que lo han encasillado en el rol de canchero y no le sacan partido a todo su saber actoral. Suponemos que lo tendrá.

Lourdes está discreta y muy discreta, para ser una mujer de origen humilde (su personaje) por lo menos la hubiera insultado en gallego a la mala. Es muy gente como uno. Hay un actor argentino que no es Héctor Silva, que también es muy estereotipado, muy convencional. Como terminó el espacio de agresión al actor/triz, me despido.

¿Podrían poner el nombre del autor del guión?

Un genio

El jueves por la mañana Enrique Vargas Peña mantuvo una entrevista surrealista con una señora, muy católica ella, que representa a una organización que está en contra de que los policías traten a los gays como si fueran personas normales o a que se les enseñe a los polis, que ellos también son sujetos de derecho como cualquier macho, machote. Piensan – en la organización católica- que el contacto de los tajhachí con los gays podría inclinar la balanza desfavorablemente para los normales o sanos pues los policías podrán contagiarse de esas malas costumbres. Entonces Enrique le preguntó porque no se preocupan también por el contacto de los varones con los curas, que son los más peligrosos por los abusos que cometen. Pocos se hubiesen animado a realizar esa pregunta.