No acostumbro mirar los programas faranduleros porque me parece una pérdida de tiempo, aunque pienso a veces que me podría tomar la molestia... como una manera de templar mi paciencia. Igual, la que he logrado cultivar me basta, así que los veo poco.

Pero para mí una de las recientes dicusiones estúpidas tuvo como escenario Teleshow. Fue aquella sobre los "concheros"....Por Dios!!! Ese programa fue el popular recurso-í, no puede pues un diminuto artículo que en realidad no cubre nada y que de hecho deja poco para la imaginación ser el tema principal de debate de todo un programa.

Quien de las modelos lo sabe usar, quien no, pero nambrena como si eso fuera importante. Si al final la idea es "mostrar" lo más que se pueda para que quien lleva tan "importante e indispensable" vestuario logre conseguir más cartel, mediática fama y por ende "trabajo".

Otra asunto tratado igualmente... por decirlo más discretamente "frívolo" me pareció el de ¿quién es la primera vedette?...socorro!!! si todos sabemos que la primera vedette paraguaya fue, es y seguirá siendo Paola Peralta, aunque, aunque, en el tiempo en que todos la presentaban como tal, el teatro de revista aún no existía en nuestro medio ni por accidente, pero, era la primera vedette entonces ¿muchachos? Por favor!!! Todavía hay duda??

En realidad particularmente creo que instalar estas polémicas, sirve solo para mostrar cuanto son capaces de hacer las "modelos" para aparecer en un medio de comunicación. Hasta discutir con una de las co-conductoras del programa también "modelo" respecto a quien tiene más trabajo que la otra, aunque se comprende porque mucho no se les puede pedir más que "adornar" la pantalla o para que las demás compitan por quien tiene menos celulitis y terminar el concurso con una tonta discusión aderezada con ataques personales como "no estás a mi altura" o "andá cámbiate la cara, fea"...

Pero bueno, que les podríamos pedir total son LINDAS es lo que importa no tanto lo demás, si al final lo que sobresale no es precisamente la inteligencia...mal que me pese... por cierto.