¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Tv Paraguaya.com escriba una noticia?
VIERNES DE EDITORIAL
Mercedes Olivera, Editora
El 27 de noviembre recibí la llamada de alguien que dijo ser Verónica Wiens. Me contó una larga historia de intrigas, en la que se involucró como protagonista sumando a Arnoldo Wiens y a otras personas. Como corolario de su relato de vaivenes sentimentales me solicitó el teléfono de Leticia Barrios con quien después habló en una charla que la periodista grabó. Durante la conversación yo pensé que ella no era Verónica (aunque no se lo dije) porque he visto el programa de la Señora de Wiens y ni la voz, ni la forma de expresarse me parecieron las suyas. Leticia Barrios tuvo la misma impresión. Ante la idea de que la llamadora podría ser una impostora, enseguida me comuniqué con el Pastor Alfred Neufeld y más tarde con Arnoldo Wiens. Acordamos que ellos solicitarían vía judicial la identidad detrás del número telefónico y que de encontrarse culpables, serían expuestos.
Casi diez días después, toma contacto con Marcelo Acosta y conmigo el abogado Rodrigo Monges, quien manifestó que estaba atendiendo el caso para Arnoldo Wiens. Nos solicitó realizar un desmentido de los rumores que en su oportunidad habíamos comentado. Después de invertir mucho tiempo en explicarle a Monges que no podríamos desmentir un rumor (por ser un rumor justamente, que además no era injurioso ya que sugería que Wiens se habría mudado de casa y que Verónica podría ocupar eventualmente la dirección de RED GUARANÍ) y luego de su gran insistencia quedamos en que si contaríamos la historia de la que nos parece es una falsa Verónica. Está en este link. Por otro lado, en el mes de agosto, ya habíamos tomado la palabra de Arnoldo como la última y desestimamos que se hubieran separado. El jueves, el abogado vuelve a comunicarse conmigo diciendo que Arnoldo no está satisfecho y que desea que Marcelo Acosta desmienta afirmaciones de que Wiens "estuvo cabezudeando" y que "faltó al sexto mandamiento". Marcelo me afirmó que el jamás usó esas expresiones para referirse a Wiens. Me puse a investigar y resulta que eso apareció en un artículo de DIARIO CRÓNICA que pueden encontrar en este enlace.
Hasta ahora, seguimos esperando que Arnoldo Wiens y sus asesores jurídicos operen sobre lo que creímos les daría tranquilidad: saber si alguien usurpó la identidad de Verónica Wiens y porqué lo hizo, empeñándose en divulgar una sórdida versión que involucra a mucha gente. Pero esta no parece hasta el momento su prioridad, sino que han puesto por delante exigirnos desmentir hasta lo que no dijimos. Me estoy sintiendo presionada, burlada en mi buena fe y extrañada porque el jueves el abogado me manifestó que a Arnoldo le molestaba que yo hubiera usado el artículo de Mario Benedetti (escrito en 1988), " El llanto Jimmy Swaggart", que me pareció ideal para ilustrar la hipocresía de ciertas comunidades. Vale la pena leerlo, pueden encontrarlo aqui. Tampoco le agradó que en su comentario del jueves, Marcelo Acosta resumiera los hechos enumerándolos.
Espero, que para Arnoldo Wiens y sus allegados sea más importante el fondo que la forma y que se descubra cualquier gata encerrada que pudiera haber, porque no quiero ser grosera pero a la luz de lo actual se me aplica el dicho popular "el que se mete a comedido...sale jodido"