Mercedes Olivera

¿Que sucedería, si en algún canal alguien o "alguienes" se atrevieran a censurarle invitados a Humberto Rubín? ¿Creen que él diría si como no, señor peladito ni volveré a intentarlo? ¿O que más bien se plantaría y amenazaría convincentemente con levantar sus programas y mandarse mudar? ¿Qué piensan que harían los del hipotético canal? ¿Ensayarían una pose contra el piso y reptarían hasta convencerlo de que se quede?

Usando el "realismo mágico", expresión que suele emplear Humberto, la escena podría ser interesante incluyendo incluso palabras airadas, algún grito tal vez y el repaso de una trayectoria que los ofensores ni siquiera comprenderían. En ese momento Rubín recordaría cosas que escuchó de esa misma gente y a las que no dio importancia. Al final hermanado con otros, que en esta alucinada ficción están deseando que su ciclo finalice liberándose de tratar con intratables.

Pura imaginación, para matizar la semana que se presenta larguísima y con poco que comentar. A propósito, este jueves en el programa de Humberto Rubín disfrutaremos de AB OVO, no se lo pierdan.