VIERNES DE EDITORIAL

Mercedes Olivera, Editora

He dicho en repetidas ocasiones que me gusta la TV basura, esa variante medio bizarra que combina en forma astuta el chisme, el humor y alguna que otra curiosidad del ambiente. Para producirla, el factor principal es contar con gente inteligente, que pueda extraer de los hechos más comunes, aquello que seduzca a los televidentes generando esos debates absurdos que entretienen sin hacer daño a nadie. El propósito es divertir, con cierto riesgo de incomodar. Los que saben hacerlo se cuidan de no producir daños irreparables, porque el show tiene que continuar...con los mismos. A veces, hasta a los expertos se les va la mano, como a los argentinos con en el caso de Beatriz Salomón, cuyo tratamiento fue de una crueldad que hasta ahora avergüenza a todos sus protagonistas.

CANAL 13, esta semana ha sido escenario de varios despropósitos pretendiendo explotar un género para el que sus empleados han demostrado carecer de cualidades, formación y capacidad. Exhibieron una supuesta amenaza de bomba como si fuera un trofeo en el marco de las intervenciones de sus exponentes menos serios, arrogándose el mayor protagonismo Santiago González. Luego, Fontirroig "aportó" en una ocurrencia asombrosa que "había recibido advertencias" para no circular en un sector de la ciudad y comprar en ciertos supermercados porque "allí habría amenazas", claro expresando a medias que se trataba de los comercios de Vierci. Pero eso no fue todo, el jueves se dedicó a desbarrar contra uno de los más talentosos y reconocidos empresarios productores del medio, con quien sus patrones (los Chena) estaban negociando un formato. Además, inexplicablemente volvió a introducir a Vierci, diciendo que probablemente Flo Gismondi estaría siendo perjudicada por TELEFUTURO porque ella, mantiene una demanda con ellos. Parece que Celina Gracia olvidó contar que es su pareja Mirko Belaich el elemento central de ese conflicto, dado que el canal de Villa Morra estaría respondiendo por acciones de Belaich hacia Flo, en la época en que ella bailaba en México y él era Director Artístico de TELEFUTURO. En el mismo programa, Pablo creó un problemón que terminó con denuncia en la fiscalía, porque detalló los horarios de Néstor Amarilla, quien tiene una demanda millonaria contra CANAL 13, resulta que Amarilla se dio cuenta de que lo están siguiendo. ¿Para qué lo harían? Claro, ahora se siente en peligro.

CANAL 13 nos acostumbró a los bochornos, uno de este año fue propalar la poca credibilidad de IBOPE para volver a ser sus clientes en este momento, ya que Pablo los aludió para que se verifique que su rating no es tan escaso como todos pensamos. El problema no es querer llenar horario con una propuesta farandulera, sino dar pantalla a Pablo y Celina, que además de ser vulgares, necesitan dirección...para no exagerar mostrando que tienen la lengua suelta y el cerebro atado.